El primer paso es revisar
si tu bozo mentón y cejas están perfectamente depiladas: cualquier "sombra"
fuera de lugar lo estropea todo. El secreto para las cejas: unir con una línea
(podes usar un lápiz o un palito) el borde externo de la nariz con el ángulo del ojo,
hasta ahí debe llegar el punto interior de la ceja. Luego unir en forma oblicua el
borde de la nariz con el extremo del ojo y tendrás el largo adecuado para tu ceja...
Nunca se debe quitar pelitos de mas, ni se deben llevar muy finitas ya que endurecen
la mirada.
El segundo paso es ver cual
va a ser la paleta de colores que vas a usar, esto varia de acuerdo a: la ocasión, el
momento del día, tu ropa, tu peinado, tus características físicas y tu gusto.
Ponemos las manos a la obra
colocando en primer lugar el corrector de ojeras. Sobre todas las sombras , lunares y
granitos que no nos gusten. El dato: como en una pintura, usar un corrector oscuro para
esconder rasgos indeseables y uno clara para hacer resaltar (pómulos muy suaves, una cara
muy angulosa etc.). Colocar muy poco y esparcirlo con la yema del dedo para esfumarlo.
Luego colocamos la
base de maquillaje elegida, teniendo en cuenta que no debe ser muy distinta al color
natural de la piel. El único fin estético de la base es justamente eso: ser una base
bien pareja para un make-up perfecto. Hoy en día para existen bases satinadas que dan un
aspecto aterciopelado y sin brillo.
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