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TRUCOS E IDEAS PARA LA COCINA: 1* PARTE. | ||
Pimientos bien pelados. Para que te sea más fácil retirar la piel de los pimientos enteros con las manos una vez asados, conviene meterlos en una bolsa de plástico o envuélvelos en un papel de periódico durante diez minutos aproximadamente. Limpiar el pescado. Hazlo siempre bajo el chorro de agua fría no demasiado fuerte para que no se deshaga, tanto por dentro como por fuera. Nunca lo dejes en remojo y sécalo muy bien, utilizando después un papel absorbente. Freír pescado sin olor. Para paliar el olor que se extiende por la casa cuando se fríen algunos pescados, especialmente sardinas y boquerones, puedes untar estos con limón, o pasarlos por agua con leche antes de freírlos. Además de oler menos, ganarán en sabor. Quesos aromáticos. Para que recupere todo su aroma, saca el queso de la heladera media hora antes de consumirlo. Ten en cuenta que el excesivo frío altera considerablemente el olor y sabor característico de este tipo de alimento. Morcillas en su punto. Pínchalas con un tenedor para evitar que se revienten cuando las frías enteras. Si están troceadas, pásalas por harina. Si las quieres consumir ligeras de grasas, lo mejor es que las hagas en el microondas o en el horno convencional, sin añadir ningún tipo de grasa adicional. Conservar papas. Si cortas papas para tortilla con uno o dos días de antelación, o bien te han sobrado, guárdalas en un recipiente bien tapado, mezcladas con huevo batido. Así no se secarán. Otra solución es meterlas en un recipiente hermético bien cubiertas con agua fría salada, y dejarlas en la nevera. Verduras hervidas en leche. Hay ciertas verduras como la patata, la zanahoria o la endibia, que mejoran sorprendentemente su sabor hervidas en leche en lugar de hacerlo en agua. Además, adquieren una textura mucho más suave y aumentan su valor nutritivo. Salsa para espaguetis. No tires los trocitos de queso que te van quedando en la nevera. Cuando tengas varios, haz una salsa mezclándolos todos con crema de leche y abundante albahaca. De esta manera, tus espaguetis quedarán exquisitos por muy poco dinero. Asar carne. Para asar un trozo grande de carne en el horno, debes ponerlo a temperatura media para que se vaya haciendo lentamente y se cueza bien por dentro. Si el trozo es pequeño, el horno debe estar caliente, para que se haga rápidamente y, así, no corres el riesgo de que llegue a quemarse. Mayonesa sin ´salmonella´. Para evitar el peligro de salmonella que acecha a la mayonesa, sobre todo en verano, sustituye el huevo por un poco de leche. Puedes utilizar la cantidad que desees, pero piensa que las proporciones con los otros ingredientes no varían. |
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